AAVV SAN JULIAN

AAVV SAN JULIAN

jueves, 13 de octubre de 2011

MÁS VALE PREVENIR QUE CURAR







Estamos viviendo un otoño tremendamente seco y caluroso, con temperaturas máximas demasiado altas, muy por encima de la media normal para estas fechas, las condiciones anticiclónicas que imperan en nuestra atmosfera impiden la entrada de borrascas que puedan cambiar el panorama climatológico a corto o medio plazo y aparezcan las tan deseadas lluvias otoñales que le den a nuestros campos el agua que necesitan. No obstante, todo puede ocurrir y vernos de nuevo con el agua al cuello. No quisiera ser agorero ni mentar la soga en la casa del ahorcado, pero  por si acaso, nos hemos tomado la molestia de inspeccionar  el cauce del río y la presa de Casas Nuevas, sirvan estas fotos como documento gráfico de su estado actual.
Tras dos años de intensas lluvias y grandes inundaciones, podemos observar como el lecho del río se ha limpiado y profundizado bastante, este hecho ha ocurrido porque al menos tres de las compuertas de la presa, fabricadas de traviesas de madera, han terminado cediendo, permitiendo el arrastre de agua y lodos retenidos, tal vez a esto se deba el inexplicable comportamiento que tuvieron las aguas en la última inundación de Diciembre pasado. Aquella noche, después de terminar la “función” de evacuación y retirarse toda la comitiva política y digo bien, porque aquí no quedó ni el Alcalde Pedáneo,  los que aquí quedamos, siempre los mismos, esperando la llegada del agua y tratando de salvar lo salvable de las viviendas en cota más baja, pudimos observar que el agua llegó con rapidez a la Ronda Norte, eran las 22,00 horas y  estaba previsto, según la información que nos facilitó el entonces alcalde, Sr.Relaño, que ello ocurriría  más entrada la madrugada, también sabíamos, según las citadas informaciones, que el caudal que bajaba era superior al que provocó la inundación en febrero, por lo que intuíamos que en esta ocasión vendría con mayor virulencia y cota más alta. ¡Cual fue la sorpresa de los que allí estábamos!, cuando observamos que el agua, que incluso había llegado a entrar ya en algunas viviendas, comenzó de pronto a retirarse perdiendo nivel poco a poco. Alguien comentó, “algo ha pasado en la presa”, efectivamente, algo ocurrió aquella oscura y turbulenta noche del mes de Diciembre que evitó que la inundación fuera a más, el abandono, los efectos devastadores del tiempo habían actuado sobre la madera de aquellas viejas compuertas que no aguantaron el embiste de las aguas, jugando esto  a nuestro favor.
Ahora, podemos observar cómo se ha limpiado de lodos el embalse que antes prácticamente colmataban hasta el labio del muro, ya que las compuertas operaban desde la base inferior de dicho muro, permitiendo esta operación y esta limpieza no ha sido mayor porque aun quedan compuertas cerradas y aterradas.
Esta situación, que por un lado merma el riesgo de inundación en San Julián, por otro lado está ocasionando serios problemas en la captación de agua para el riego de los cultivos, por la pérdida de nivel que ha sufrido el río en las estaciones de bombeo aguas arriba.
Por todo ello, desde esta Asociación pensamos que habiendo constatado, como se relata en párrafos anteriores, la noche de la última inundación sufrida, que si existe suficiente capacidad de evacuación de agua en la presa, es decir, si todas sus compuertas pueden desalojar, se puede reducir bastante el riesgo de inundación en San Julián o por lo menos serán necesarios mayores caudales para que ello ocurra, no aceptaremos, como ciudadanos afectados, ninguna solución que no suponga la limpieza y puesta en operatividad de todos los mecanismos de evacuación de agua (compuertas) que dispone la presa, de modo que abran en épocas lluviosas, permitiendo el desalojo y cierren en periodos de sequía para retener, favoreciendo  la captación de agua para riegos y la regulación del caudal que permita la vida de la fauna fluvial.